Se trata de un brandy obtenido por el tradicional sistema de la doble destilación en alambiques y envejecido en barricas de roble francés. El componente innovador llega tras el añejamiento, cuando es sometido a un filtrado mineral que permite preservar todo su sabor y carácter, pero eliminando el característico color que le ha aportado la madera. El resultado es un brandy totalmente cristalino, que ha alcanzado un equilibrio óptimo en su sabor sin perder la madurez gracias a la experiencia y perseverancia del Maestro Destilador Matías Llobet y varios años de experimentación.
Primer brandy cristalino de la historia, hecho en Barcelona. Torres Alta Luz simboliza la pureza del brandy añejado y deslumbra con la magia de lo inexplorado. Se trata de un brandy obtenido por el tradicional sistema de la doble destilación en alambiques y envejecido en barricas de roble francés. El componente innovador llega tras el añejamiento, cuando es sometido a un filtrado mineral que permite preservar todo su sabor y carácter, pero eliminando el característico color que le ha aportado la madera. El resultado es un brandy totalmente cristalino, que ha alcanzado un equilibrio óptimo en su sabor sin perder la madurez gracias a la experiencia y perseverancia del Maestro Destilador Matías Llobet y varios años de experimentación. Es un brandy fresco y muy agradable. Puro y a la vez complejo; en nariz aporta aromas frutales dulces con notas herbáces y cítricas propias de la uva con la que se elabora el destilado, que se fusionan en perfecta sintonía con delicados toques de miel y vainilla. En boca, es suave y de complexión sedosa, con sabores afrutados ligeramente dulces y un final aromático y limpio.